La trata de seres humanos constituye una seria violación de la dignidad y de la libertad de la persona y es una forma de delincuencia grave, que en la mayoría de las ocasiones implica a organizaciones delictivas a las que proporciona importantes beneficios. Es la esclavitud de nuestro tiempo y es una realidad en nuestro país.
Las víctimas de la trata son captadas, transportadas o alojadas a la fuerza, mediante engaño o aprovechando su situación de vulnerabilidad, con el propósito de obtener un beneficio de su explotación.
La trata con fines de explotación sexual, una de las vertientes más crueles de este comercio ilícito, ha adquirido dimensiones que sobrepasan la de otras formas de trata. Además, afecta a las mujeres de manera desproporcionada, no sólo por registrar la mayor parte de las víctimas, sino porque las formas de explotación a las que son sometidas suelen ser las más severas.
La trata de mujeres y niñas con fines de explotación sexual debe entenderse, por tanto, en el contexto de desigualdad y violencia a las que están sujetas en las sociedades de origen, donde mujeres y niñas se enfrentan a constantes violaciones de sus derechos humanos y económicos, así como a la desigualdad en la educación, la formación o en el ámbito laboral.
APERTURA DE LA EXPOSICIÓN VIERNES 8 DE ABRIL A LAS 10:30 HORAS
La exposición cedida por el Instituto de la Mujer, Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, se podrá visitar en la Casa de la Dona desde el 5 hasta el 22 de abril.